Capitulo 4: Un nuevo comienzo.

Observaba el cielo, como si el tiempo así pasara mas rápido.

Mi diario se encontraba tirado en el piso, abierto en el ultimo dibujo que hice.

Era una pequeña gaviota, me había basado en una foto que tenia en mi antigua casa, que saque cuando estábamos de vacaciones.

La gaviota miraba hacia el cielo. Como yo lo estoy haciendo.

Sentí unos pasos detrás de mi, me di vuelta, casi por instinto. Era la señorita Church.

Me pare, y sacudí el pasto que estaba en mis pantalones.

-Hola-Susurre.

-Debes venir conmigo.

Esa frase me recordó, cuando la directora se presento en el hospital, cuando estaban curando mis heridas a causa del incendio.

-Debes venir conmigo- había dicho.

Sentía que las lágrimas se estaban juntando en mis ojos.

La señorita Church, comenzo a caminar por delante mio, corri para poder alcanzarla.

En la entrada de el edificio principal se encontraba un lujoso auto negro. Era muy hermoso.

Entramos en completo silencio, era abrumador.

Subimos las escaleras, y mi mente viajo en el pasado.

Recordé sus ojos grises, que luego, me había dado cuenta que en el borde eran violetas.

Su vos suave, pero a la vez varonil.

-Rosalie- me dijo la señorita Church, mirándome un poco ¿Confundida? Si, definitiva mente estaba confundida- ¿Que anda rondando en esa cabezita?

-Eh... Nada importante.

Mentira. Para mi si era importante.

Abrió la puerta de la dirección, sin antes tocar tres veces.

En una de las dos sillas, estaba sentada una mujer de pelo ondulado y rubio. Que se giro a verme.

Me sonrió, le devolví la sonrisa.

-Rosalie, ella es tu tía, Coraline.

Coraline se levanto de su asiento, y me abrazo.

Me sentí cómoda en ese momento.

-Mirate, estas tan grande.

Le sonrei.

Luego de una larga charla con la directora, me abrazaron, y se despidieron.

Bajamos y salimos afuera.

Coraline abrió la puerta del copiloto, de aquel hermoso auto negro.

Me acerque, sin saber muy bien que hacer.

-Subete- me dijo bastante alegre Coraline.

Me subí al auto, y me reí.

-¿Mis maletas?

-Están en guardadas en el baúl del auto. Me llamo Coraline, aunque ya lo sabes.

-Yo Rosalie.

Nos reímos sin razón por unos segundos, luego puso en marcha el auto.

******

Holaaa perdon por la larga tardanza, despues subo la segunda parte.